Harta...

- De decidir ponerme ojotas y luego se ponga a llover
- De dejar la bici en todos lados porque llueve y luego tener que ir a buscarla
- De volver a casa sin bici, pero igual empapada con la ropa sucia
- De que el lavadero de la esquina esté cerrado cada vez que llevo ropa a lavar
- De que el súper de la esquina esté cerrado cada vez que necesito algo con urgencia
- De tirar cosas de la nevera en tal estado que ya no reconozco qué eran
- De guardar cosas en la nevera que no comí y sé que voy a terminar tirando
- De acordarme de sacar la basura sólo los sábados, cuando no pasa el basurero
- De no tener nunca monedas para el bus
- De que nadie me quiera cambiar monedas para el bus
- Del bus
- De que el subte siempre pare con la puerta lejos y nunca delante de mí
- De tener que ser yo siempre la que dé el asiento a viejitas y embarazadas
- De que todas a mi alrededor estén embarazadas
- De que en las reuniones haya siempre el mismo tema de conversación: embarazos y/o matrimonios y/o separaciones
- De estar harta

R.I.P.

Ayer murió John Updike.

Norman Mailer dijo de él que era el tipo de autor apreciado por lectores que no tenían ni idea de escribir. Y el año pasado los jueces del premio "El Peor Sexo en Ficción de Gran Bretaña" le otorgaron el premio honorífico a toda su carrera.

Pero ellos qué sabrán...?

Pelopinching

En el agua, retro gafas de sol, embadurnada de protector solar y en una mano un jugo multifruta cargado de hielo, escuchando:

Que no falte

Cuando Almodóvar recibió su primer oscar agradeció a la Virgen de Guadalupe, a la Macarena, al Sagrado Corazón, al Cristo de Medinaceli y a la casi totalidad del santoral español: “Les he puesto muchos cirios con hojitas de laurel porque trae suerte" dijo.

(Después os cuento)

Ídola

This is the return of the space cowgirl

Pasou un tempo xa, mais a volta ven con ghanas.
Sobre as cousas que pasaron nestre intre de tres meses pouca cousa podo dicir. Excepto que a pesar de que unha se pensa maior, a verdade é que por dentro xamáis dos xamases o de adentro creceu. Parece que sigo sendo a mesma rapaza que cargaba óleos (nunca afinei cós acrílicos) e bastidores polo renfe abaixo. Benditos tempos aqueles.
E se o certo é que xa non pinto nada –o lápiz é mais resultón- sego aprendendo todo-los días algo novo. Nalgúns casos o que fago é recordar que sabía cousas que xa tiña esquecidas.
As veces é bo recorda-las. Outras veces doen revivi-las. Pero en definitiva o que non mata enghorda, e eu xa teño que empezar a sumar algúns kilos de mais que me leva o vento –e o demo.
(Ten sentido algho de ésto?)
Así que dicido relaxarme, producirme unha pelopincho para pasar unhas fantásticas vacaciós en Villurca, e este ano que veña o que sexa, que eu podo con todo.
Eu son unha chicarrona do norte, carallo.